4 ejercicios para aliviar el estrés con el método Franklin

El ritmo de la vida moderna es frenético. Esto significa que tienes que lidiar con mucho estrés cada día, lo que afecta directa e indirectamente tu estado emocional. Sin embargo, puedes hacer algo con el estrés y una de las formas más efectivas es relajando el cuello y los hombros. Puedes hacerlo aprendiendo cuatro ejercicios para aliviar el estrés inspirados en el método Franklin.

Eric Franklin es un bailarín, coreógrafo, profesor y escritor suizo. En 1994 creó su método pionero, que combina la visualización creativa, la anatomía corporal, los ejercicios físicos y mentales y las habilidades educativas. Sigue leyendo para conocer su esencia.

La ideocinesis es la base del método Franκlin

La ideocinesis es el proceso de visualización del movimiento para entrenar al sistema nervioso a crear nuevas conexiones neuromusculares. Las ideas y prácticas de Mabel Ellsworth Todd, publicadas en 1937 en su libro The Thinking Body (El cuerpo pensante), constituyeron la base del campo.

A consecuencia de un accidente, Mabel Ellsworth Todd perdió la sensibilidad en las piernas. Los médicos concluyeron que no volvería a caminar. Decidiendo que no tenía nada que perder, utilizó su imaginación para entrenarse. Como resultado, se curó y volvió a caminar. Después de su curación milagrosa a través de su imaginación, ayudó a sanar a muchos más «casos sin esperanza».

Franκlin siguió desarrollando estas ideas en su Instituto. Entre otras cosas, desarrolló ejercicios para aliviar el estrés.

Ejercicios para aliviar el estrés

Imagina que estás en una cascada

Imagina que estás bajo una cascada. Permítete sentir el agua fluyendo por tu cuerpo, escucha el sonido de las corrientes y huele la frescura del agua. Siente cómo se desvanece toda la tensión acumulada.

Relajación de los hombros

En la vida moderna, la tensión tiende a acumularse en la cintura escapular y la columna cervical. Para relajar los hombros, primero levántalos y luego bájalos suavemente. Imagina que tus hombros se deslizan por tu espalda.

Vuelve a levantar los hombros y siente cómo se tensan los músculos. Deja que los hombros bajen, imaginando que los músculos se deslizan hacia abajo por sí mismos, alejándose de la cabeza y los hombros.

Repite el movimiento unas cuantas veces más, exhalando con fuerza mientras bajas los hombros. Al exhalar, imagina que todos tus problemas y preocupaciones están muy, muy abajo.

Levanta los hombros e inspira por última vez, luego deja que desciendan con una exhalación profunda. La última vez que lo hagas, levanta los hombros y deja que bajen con una exhalación profunda.

Una palmadita en la espalda

Todos sabemos que una suave palmadita en el hombro puede animarte en un momento difícil. Eric Franklin sugiere utilizar este gesto para aliviar la tensión en uno mismo. Concéntrate en el punto donde sientes la tensión. Relaja la muñeca y dale unas palmaditas.

Sacudir los brazos y las piernas

Este ejercicio es muy sencillo: para relajar los músculos, hay que agitar los brazos y las piernas. Las sacudidas ayudan a recuperar la flexibilidad de los tejidos conectivos de los músculos, aumentan el estiramiento de los vasos sanguíneos y aceleran el movimiento linfático.

Levanta el brazo derecho estirado delante de ti hasta la altura de los ojos. Agítalo, imaginando los músculos que cuelgan alrededor de los huesos. Concéntrate en las terminaciones nerviosas. En tu imaginación, ve que también se agitan y que se cepillan como si estuvieran espolvoreando la superficie con un globo.

Haz el ejercicio con la mano izquierda, pero antes de hacerlo, compara las sensaciones en ambos lados de tu cuerpo. Notarás los increíbles beneficios de sacudir el lado derecho.

Sacude las piernas de la misma manera, sólo que hazlo en posición sentada, sujetando una silla con ambas manos.

Este es el tipo de ejercicio para aliviar el estrés que desarrolló Eric Franklin. Pruébalo y no dejes de compartir tus impresiones en los comentarios. Mantén la salud y la tranquilidad. ¡Hasta la próxima!

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