Hoy «Simplemente Genial» te presenta un truco para almacenar tomates y poder disfrutar de este sabroso vegetal en cualquier época del año. Simplemente, congela la pulpa de tomates, previamente preparada, y consúmela fresca, al terminar la temporada de cosecha. Puedes añadirla a tus platos favoritos o usarla para preparar una salsa aromática de tomate.
Cómo disfrutar de tomates frescos durante el invierno
Necesitarás
- tomates
- bolsitas de plástico con cierres
Pasos a seguir
- Corta los tomates y pásalos a través del molino de carne.
- Envasa la pulpa de tomates en las bolsitas.
- Coloca las bolsitas en el congelador.
Así puedes guardar los tomates hasta la siguiente temporada. Para sacar los de la bolsita, ponla en el agua caliente por unos cuantos segundos. ¡Es muy sencillo!
Prepara más bolsitas con tomates y disfruta de vegetales frescos durante todo el año. ¡Comparte este truco con tus amigos!