¿Quién no sueña con una piel suave y tonificada? Incluso aquellas que tienen la suerte de tener una buena herencia, todavía están sujetas a la influencia de factores externos: rayos ultravioletas, cambios de temperatura, contaminación… Esto sugiere que incluso la cara más fresca y más joven necesita cuidados adicionales.
Ya hemos hablado sobre los beneficios de las máscaras naturales, pero el siguiente limpiador de la piel te sorprenderá, ya verás. Este producto se puede encontrar en cualquier refrigerador, disponible en envases sellados, preparado por la propia naturaleza. ¡El huevo de gallina, el más común!
Dos máscaras de un solo huevo
Huevos: alimento que el cuerpo absorbe casi al 100%. Este es uno de los pocos tipos de proteínas que se adapta perfectamente a nuestro cuerpo. Sin proteínas, la formación de músculos y colágeno es imposible, lo que se traduce en pérdida de la elasticidad de la piel. Hoy, te diremos cómo convertir un huevo en una máscara de dos fases, que limpia intensamente los poros, reduce el óvalo de la cara y nutre la piel.
Etapa uno: limpieza de la piel
- Rompe el huevo y separa la clara de la yema.
- Primero, solo necesitarás la clara: bátela hasta que forme espuma, para que se sature en oxígeno. Es aconsejable usar un huevo a temperatura ambiente, para que las sustancias actúen más activamente.
- Luego, usa una servilleta cortada en una pieza de tamaño conveniente. Remoja las dos partes en la espuma, y pégalas a la cara, para que no queden lagunas. Las piezas deben estar en capas una encima de la otra.
- Mantén la máscara hasta que esté completamente seca (aproximadamente media hora). Luego, retírala cuidadosamente como una lámina, junto con toda la suciedad.
Importante: para que no tengas que esperar mucho tiempo para que la mascarilla se seque, compacta un poco los trozos de la servilleta antes de aplicarlos en la cara. Después de completar la primera etapa, notarás que la cantidad de puntos negros disminuirá debido al efecto de la exfoliación ligera, y los poros se reducirán.
Segunda etapa: nutrición
- Bate la yema y mézclala con una cucharadita de crema agria si tu piel está seca, o yogur si es grasa.
- Aplícate una capa delgada de yema diluida y deja que se seque.
- Luego, aplícate una segunda capa y espera 5 minutos más.
- Lávate la máscara nutritiva con agua tibia.
Puedes agregar una gota de aceite vegetal o miel a la máscara de yema, para que el efecto sea el adecuado. Debido al alto contenido de vitaminas y minerales en la yema, el producto es muy efectivo. En cremas costosas, se usan conservantes fuertes para preservar estos elementos, por lo que un producto natural siempre es mejor.
La segunda etapa de cuidado es adecuada no solo para la piel de la cara, sino también para la piel alrededor de los ojos, los labios y el escote. Es necesaria para nutrir la cubierta de las sustancias faltantes.
Después de este procedimiento cosmético casero, la piel se verá no solo tensa, sino también sana, con un brillo resplandeciente. Se recomienda hacerlo al menos una vez a la semana. Asegúrate de lavar bien el huevo antes de usarlo, y puedes incluirlo de manera segura en su kit de belleza. Deseamos que siempre te veas lo mejor posible, sin emplear mucho dinero, esfuerzo o incluso tiempo.
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