¿A quién no le gustaría tomar un helado de buena calidad, especialmente en verano? Y es que, a veces, una bola de helado de vainilla es más bienvenida que cualquier caja de dulces. Estos postres se venden por doquier, y con solo mirar en el estuche se puede ver su composición, pero… ¿Y si no tienes la oportunidad de salir de compras, pero aun así se te antoja? Bien, la solución la puedes encontrar a continuación.
En anteriores ediciones te comentamos que se pueden elaborar excelentes helados en casa, y sin una máquina especializada para hacer helados. ¡Esta vez iremos aún más lejos! He aquí la receta de como hacer un delicioso helado de yogurt.
Preparación de helado de yogurt
¿Cuál es la diferencia entre un helado común y este recién inventado (también conocido como yogurt congelado o froyo)? Primero, su composición: en el yogurt hay más calcio, probióticos, proteínas y otros componentes útiles, en segundo lugar, es menos calórico. Tal postre se puede comer incluso con una dieta estricta para bajar de peso.
La disponibilidad del producto también es importante. El yogur es más barato, tanto en compra como en preparación, y es más fácil de encontrar. Al igual que con la receta de helado, necesitarás muy pocos ingredientes. También ofrecemos 5 gustos diferentes.
Receta de helado de yogurt
Para preparar una porción, solo necesitas batir el yogur con miel, y poner la mezcla en el congelador. Para una porción de yogurt sin aditivos necesitarás:
- 150 g de yogurt
- 2 cucharadas de miel
- 3 cucharadas de jugo de limon
Helado de Yogurt y Fresa
Toma fresas y yogurt en una proporción de 50 a 50 (aproximadamente 70 g de cada producto). Las fresas deben estar congeladas. Adiciónale 1 cucharada de miel y 1.5 cucharadas de jugo de limón y bátelo hasta que quede cremoso. ¡Hecho! Echa la mezcla en un molde, y al congelador (al menos 6 horas, preferiblemente toda la noche).
Helado de yogur con sabor tropical
La combinación de piña y coco cautivará incluso a los amantes más exóticos. Toma una proporción igual de yogur y rodajas de piña congeladas (70 g de cada producto), y bátelo con miel (1 cucharada) y jugo de limón (1 cucharadita llena). La piña tiene suficiente acidez, por lo que debes tener cuidado.
Luego agrégale coco al gusto. Por cierto, puedes freírlo un poco con anterioridad. ¡Postre listo!
Helado de Yogur con chocolate y plátano
Toma 100 g de rodajas de plátano congeladas, agrégale 70 g de yogur, 1 cucharada de cacao en polvo, 1 cucharada de miel, y bátelo en una licuadora hasta obtener la consistencia espesa. Una gota de extracto de vainilla hará que el helado sea aún más suave y fragante.
Helado de yogurt con mango y lima
Si tienes la suerte de encontrar mango maduro, puedes multiplicar su sabor agregándolo al helado casero. Toma 100 g de pulpa de mango congelada, 70 g de yogurt, 1-2 cucharadas de miel y 1.5 cucharadas de jugo de lima (o limón). Bate todo en una licuadora y agrégale un poco de ralladura de limón.
Helado de yogur cremoso
¡Sin fruta! Necesitarás más yogurt. Toma 150 g de yogurt, mézclalo con 50-70 g de queso crema, agrégale 1 cucharada de miel y 1 cucharadita extracto de vainilla. Bátelo un par de minutos, después de lo cual puedes congelar el postre de yogur. Por cierto, pequeños dulces de colores o topping para pasteles se verán apropiados en él.
La miel es necesaria no solo para agregar dulzura sino para evitar la formación de grandes cristales de hielo. Siguiendo estos sencillos pasos, el helado casero tendrá una textura tan suave y uniforme como el de cualquier heladera. Además, el postre con miel es verdaderamente dietético. Te recomendamos probar cada uno de estos cinco sabores, sin preocuparte por la figura. ¡No te arrepentirás!
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