Una buena nutrición es tan importante para las plantas como para los seres humanos. Por eso, las flores de interior no pueden sobrevivir mucho tiempo sólo con agua. Necesitan ser alimentadas con todos los nutrientes necesarios para un crecimiento sano. Si faltan, la planta no florecerá. Además, con la falta de sustancias útiles, puede perder su aspecto decorativo. Por eso, la alimentación de las flores de interior es muy importante.
También hay que asegurarse de que sea de alta calidad. Por eso, confiar en los abonos comprados no es una buena opción. Es mejor prepararlos en casa. Hoy te contaremos cómo hacer un estimulante sencillo pero eficaz con sólo 1 cucharada de semillas de lino, que despertará a la planta y la hará florecer con nuevo vigor. Pronto podrás ver el resultado.
© DepositphotosCómo preparar abono para flores de interior a partir de semillas de lino
Cuál es el beneficio de un abono de este tipo
Las semillas de lino son una fuente excelente de muchos elementos que favorecen el crecimiento rápido y la floración activa de las plantas de interior. Son ricas en proteínas, grasas saludables y fibra. Además, las semillas de lino contienen vitaminas de distintos grupos (B1, B6, E) y muchos minerales (magnesio, zinc, selenio y hierro).
Gracias a su rica composición, este producto sirve de base ideal para una alimentación natural en forma de infusión, que nutrirá a las flores de interior con todas las sustancias necesarias.
Preparación y uso del fertilizante de lino
Necesitarás
- 1 cucharada de semillas de lino
- 1 cucharada de bicarbonato sódico
- 3 litros de agua limpia
Lo que hay que hacer
- Coge las semillas de lino y viértelas en un recipiente grande y hondo. Añade el bicarbonato de sodio. Vierte todo 1 litro de agua limpia a temperatura ambiente.
- Mezcla bien. Deja la mezcla durante 3-4 horas. A continuación, bátela con una batidora de inmersión. Cuela la infusión con un colador.
- Vierte 2 litros de agua en la solución resultante. Mezcla todo bien. El abono está listo para su uso.
- Riega la mezcla de flores caseras bajo la raíz o viértela en un recipiente con pulverizador para rociar las plantas por la hoja. Repite este procedimiento como máximo una vez al mes.
Pero no te excedas preparando un abono de este tipo. Puesto que la infusión resulta muy nutritiva, conviene utilizar un abono a base de semillas de lino sólo una vez al mes. Recurre al uso de dicho remedio de forma regular, y verás cómo tus plantas de interior se transforman.