En nuestro tiempo, cualquier imperfección en el cuerpo ya no causa una reacción violenta por parte de los demás. Muchas estrellas, siempre manteniendo la positividad, ya no ocultan sus kilos de más, estrías y cicatrices. Algunas incluso se negaron por completo a retocar sus propias fotos. Pero el período de gloria de la reconocida Marilyn Monroe cayó en los años 50 del siglo pasado. En ese momento, las damas de Hollywood tenían que lucir, sin exagerar, impecables.
¡Simplemente Genial! te dirá qué secreto escondió Marilyn Monroe detrás de siete candados durante muchos años.
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EL MISTERIO DE MARILYN MONROE
Estamos acostumbrados a ver a una de las mujeres más notorias del siglo XX – Marilyn Monroe – con atuendos chic, joyas caras, perfecto maquillaje, peinado y figura en general. Pero solo se veía así en las películas o en la alfombra roja. Monroe, como absolutamente cualquier persona, tenía sus defectos.
- Cicatriz abdominal
Como actriz y cantante, Marilyn más de una vez tuvo que aparecer ante el lente con atuendos reveladores, trajes de baño abiertos o sin ellos. Sin embargo, pocas personas sabían que la chica tenía que esconder en todo momento una larga cicatriz en el abdomen, que le quedó tras la extirpación de la vesícula biliar. Durante las sesiones de fotos, generalmente la retocaba o la escondía hábilmente detrás de un traje de baño de cintura alta. Y sin embargo, en algunas imágenes se puede ver la cicatriz.
© Gettyimages - Entrecerrar levemente los ojos
Por supuesto, es difícil creer que una de las bellezas verdaderamente legendarias de Hollywood haya entrecerrado los ojos. Cuando Monroe estaba comenzando a construir una carrera, este defecto la obstaculizó mucho. Fue difícil pasar por las audiciones. Los directores se vieron obligados a rechazar a la joven y ambiciosa actriz. Es por eso que la chica eventualmente aprendió a reducir visualmente esta imperfección a cero, usando hábilmente maquillaje y ángulos favorables.
© Gettyimages - Barbilla inexpresiva
Desde su juventud, Marilyn Monroe soñaba con darle a su rostro una forma más clara. El mayor disgusto en ella fue causado por su barbilla inexpresiva, con la que la naturaleza la dotó. Al final, la chica se decidió por la cirugía plástica e instaló un implante en el mentón en forma de una esponja marina especial. En ese momento, tal procedimiento era muy raro y riesgoso. Desafortunadamente, Monroe pronto tuvo consecuencias desagradables. El implante no se enraizó bien, por lo que tuvo que recurrir a repetidas intervenciones quirúrgicas.
© Gettyimages - Tartamudeo
Un impedimento del habla en una carrera como actor podría ser un gran obstáculo para el éxito. Pero Marilyn fue capaz de vencer este desperfecto. Comenzó a pronunciar el texto, estirándolo, con un aliento picante. Como resultado, esta característica se convirtió en un «punto culminante» y se mezcló de manera absolutamente armoniosa con su imagen.
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Como puedes ver, incluso tales imperfecciones no evitaron que la chica se convirtiera en una personalidad, actriz, cantante, modelo insuperable y en un símbolo sexual de la década de 1950. Su historia muestra que cualquiera puede alcanzar alturas sin precedentes, solo tiene que proponérselo fuertemente y luchar por ello. ¡Lo principal es la perseverancia, el trabajo duro y la fe en uno mismo!
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