¿Qué sucede si dejas de comer pan comprado, y nunca vuelves a empezar?

Cuando era adolescente, tuve la oportunidad de enfrentar el problema del sobrepeso. Para bajar de peso, eliminé el azúcar y los dulces de la dieta, así como todos los productos horneados. Entonces todavía no entendía cómo se podía sustituir el pan. Pero ahora veo esta pregunta de manera diferente. En el artículo de hoy te diré por qué debes prestar más atención al consumo de pan y qué tipos de pan no dañan tu figura.

QUÉ PUEDE SUSTITUIR AL PAN

Comencemos con lo básico. Seguramente sabes que hay muchos tipos diferentes de pan. Por ejemplo, está el pan integral, el de avena, el de harina de centeno o el pan de salvado. Y también el favorito de todos: el pan blanco hecho con harina de trigo.

Las propiedades nutricionales del pan dependen de la composición del mismo y de si el producto aporta, al menos, algún beneficio al organismo. Los nutricionistas sostienen unánimemente que es mejor excluir por completo el pan blanco de la dieta. De hecho, no es más que un chupete alimenticio. Aquí hay una lista de razones que te convencerán de por qué debería renunciar al pan blanco.

¿QUÉ PASA CON EL PAN BLANCO?

El pan blanco es un verdadero obstáculo para el cuerpo. Al principio te parece que te has llenado, pero después de un muy corto período de tiempo volverás a sentir hambre. ¿Cuál es el truco?

Además, el consumo excesivo de pan blanco puede provocar efectos adversos muy graves en tu organismo. No es de extrañar que, debido a este pan, aumentes tan fácilmente de peso.

«Pero el pan blanco está hecho con harina de primera calidad. ¿Acaso no es útil?» – te preguntarás. El hecho es que todas las propiedades beneficiosas del trigo, incluidas la fibra y los minerales, se reducen a cero después de que el grano se convierte en harina.

Imagínate toda la secuencia de la producción de pan blanco. Para aumentar los rendimientos del trigo, los productores deben usar pesticidas. Además, los cultivos a menudo se tratan con productos químicos para eliminar diversas plagas y hongos. A largo plazo, todo esto puede afectar tu bienestar.

Por cierto, ¿te has preguntado alguna vez cómo los fabricantes logran el color blanco como la nieve de la harina? Para esto, usan blanqueadores especiales, que difícilmente pueden llamarse útiles.

Sobre el gluten

El pan blanco es la principal fuente de gluten. Su consumo excesivo puede provocar un deterioro del estado de tu piel. Si notas que han comenzado a aparecer erupciones desagradables en tu rostro, en primer lugar, presta atención a tu dieta. La raíz del mal se encuentra precisamente en el pan.

Además, los expertos dicen que el consumo excesivo de productos de harina puede provocar un envejecimiento prematuro. Y eso, antes que nada, se notará en el estado de la piel de tu rostro.

Si no lo crees, haz un experimento sencillo. Intenta renunciar al pan blanco y otros productos de harina de trigo durante al menos un mes. Ve si tu apariencia cambia, si mejora. Créame, el resultado no tardará en llegar.

Por cierto, no todo el mundo sabe cómo se manifiesta la intolerancia al gluten. Si te preocupa un deterioro de la digestión o una hinchazón frecuente, esta es otra alarma que indica que es mejor rechazar el pan blanco. Puedes reemplazarlo con granos integrales, que son ricos en fibra. Solo gracias a ello tu tracto digestivo se ordenará y empezará a funcionar como un reloj.

Sobrepeso

Si deseas perder un par de kilos de más, no es necesario que elimines por completo el pan de su dieta. Nuevamente llamamos tu atención sobre el hecho de que hay análogos más útiles del pan blanco. Por ejemplo, un pan elaborado con harina integral o de centeno. Tan solo 100 g de pan integral de calidad contienen casi 9 g de proteína. Además, este pan es menos calórico que su hermano blanco.

Por cierto, el pan integrar no solo es más saludable, sino también más sabroso. Descubrirás el sabor de los productos a los que no estás acostumbrado de una manera nueva cuando los pruebes en combinación con pan integral o de centeno. Y estarás mucho más saciado: todo gracias a la fibra saludable del pan.

No recomendamos renunciar a ningún pan. Pero si deseas experimentar con la nutrición, sigue algunos consejos. Los productos horneados se pueden sustituir por ensalada verde. Por ejemplo, absolutamente cualquier relleno se puede envolver en hojas de lechuga. El resultado son rollos originales y saludables.

También puedes sustituir el pan por panecillos. Sin embargo, recuerda que hay diferencias entre ellos. Asegúrate de estudiar las composiciones y elegir productos hechos con harina integral. Los panes crujientes de arroz sin pulir se consideran los menos ricos en calorías.

Otra alternativa útil son las galletas sin sal. Se produce de muchas formas diferentes, incluida la harina de trigo normal. Ofrecemos una opción de harina integral o salvado.

Del consejo editorial

Sé de primera mano lo que son las restricciones alimentarias y a qué pueden conducir. En lugar de eliminar por completo cualquier producto de tu dieta, mejor limítate a encontrar una alternativa decente y saludable a ese producto que te hace daño. En el caso del pan blanco, la harina integral es la mejor opción.

Dime, ¿con qué frecuencia comes pan y qué tipo te gusta más? Si también has vivido la experiencia de rechazar completamente la harina, asegúrate de escribirnos tu historia. Danos un Me Gusta y comparte este link con los amigos de las redses sociales. ¡Esperamos impacientemente tu opinión!