Las alitas de pollo fritas son la especialidad de cualquier restaurante de comida rápida, y es cierto que son deliciosas, pero… ¡Nada como un buen plato casero hecho con amor y con tus propias manos! Todo amante de la cocina sabe que el secreto del éxito culinario no solo está en la elección correcta de la receta y los ingredientes, sino en la energía y amor con que se prepara el platillo. ¡Y para ello no necesitas ser un maestro de la cocina!
«Simplemente Genial» te propone una versión de las tan populares alitas de pollo fritas. Este platillo es más saludable que el que podrías encontrar en un establecimiento público, pues, en vez de freírlas en aceite, vamos a utilizar el horno. Además, le vamos a agregar una deliciosa salsa barbacoa, mucho mejor que cualquier salsa comercial.
La receta de dicha salsa es muy sencilla de elaborar: solo basta mezclar algunos ingredientes, cocerlos un poco, y ya está. El resto es aún más fácil: embadurnar el pollo con la salsa y enviarlo al horno.
Si deseas añadirle un poco de valor nutricional a este plato, puedes agregarle unas patatas. O si lo prefieres, un poco de verdura a la plancha. Las opciones son muchas…
Sin más preámbulos, he aquí está esta estupenda receta.
Ingredientes
- 6 unidades de alas de pollo
- 225 gramos de ketchup
- 100 ml de zumo de naranja
- 75 gramos de miel
- 1/2 cda. de salsa de soja
- 1/2 cda. de ajo en polvo
- 1/2 cda. de cebolla en polvo
- 1/2 cda. de jengibre
- 40 ml de vinagre
- 50 gramos de azúcar
Preparación
- Lo primero es la salsa, que es muy fácil de preparar. En un cazo, agrega los ingredientes de la receta (menos las alitas). Mezcla bien y coloca el cazo al fuego. Calienta hasta que la salsa rompa a hervir. Cocina a fuego medio durante unos 30 minutos o hasta que la salsa se espese. Es importante que remuevas la salsa regularmente. Una vez esté bien espesa, retírala del calor y déjala enfriar.
- Mientras la salsa se enfría, asegúrate de eliminar los restos de pequeñas plumas que puedan quedar en las alas. Para ello, puedes usar un soplete de cocina, o, simplemente encender uno de los fuegos de una cocina de gas, e ir pasándole con cuidado por encima las alas, hasta quemar las plumas.
- A continuación, busca un cuenco de base ancha o una fuente, y agrega un poco de salsa barbacoa en el fondo. Coloca dentro las alitas de pollo y embadúrnalas bien con la salsa. Reserva una parte de la salsa para servir junto a las alitas ya horneadas al momento de comerlas, o sobre unas patatas fritas con las que has de acompañar este plato.
- Una vez que untadas las alas, cubre el cuenco con un plástico y déjalas reposar por, al menos, una hora. El resultado será aún mejor, si las dejas macerar en la nevera durante toda la noche. De vez en cuando, gira las alas para que se impregnen bien con la salsa.
- Precalienta el horno a 200º C, unos 20 minutos antes de hornear las alitas.
- Coloca las alitas en una fuente para horno, de modo que queden bien extendidas, para que no se toquen y se doren por ambos lados.
- Hornéalas a 200º C, durante 30 minutos. Si deseas obtener un dorado uniforme, cuando hayan transcurridos unos 15 minutos, saca la fuente del horno y gira las alitas.
- Cuando estén bien doradas, sácalas del horno y sírvelas de inmediato con un poco de la salsa.
Un consejo
Para optimizar el tiempo, y por qué no, el gasto de energía que implica encender el horno, aprovecha y hornea unas patatas que te vendrán de maravilla para acompañar estas alitas.
Este es un plato exquisito. ¡Nada como degustarlo acabadito de hacer! Así que ya sabes… Invita a tu familia y amigos para que juntos disfruten de estas deliciosas alitas de pollo, fritas al horno. Seguro te lo agradecerán…
