El sulfato de magnesio es muy útil en la medicina, pero… ¡Quién iba a decir que también tiene otros beneficios!

El Sulfato de magnesio, también conocido como sal de Epsom o sal inglesa, es un compuesto químico muy demandado en el campo de la medicina. Seguramente habrás escuchado hablar de las aplicaciones de esta sustancia, y no es un rumor, pues el magnesio es un excelente sedante, anticonvulsivante y antiespasmódico.
 
Pero hoy nuestra edición se propone a hablarte de otras de sus propiedades, y cómo aplicarlas en beneficio de nuestro cuerpo.

Aplicaciones del Sulfato de magnesio

  1. Para el cabello

    Este compuesto químico es muy bueno para fortalecer y energizar el cabello. Para ello, basta mezclar una cucharada de sulfato de magnesio con la misma cantidad de acondicionador para el cabello. Después del lavado de cabeza, aplica esta mezcla sobre toda la longitud del cabello y déjala actuar por 5 minutos. Luego aclara con abundante agua tibia.

    Este tratamiento es ideal para las personas que sufren de pérdida de cabello.

  2. Para la cara y el cuerpo

    El sulfato de magnesio es un ingrediente maravilloso a agregar a un exfoliante facial. Solo tienes que mezclar una pequeña cantidad de crema hidratante con la misma cantidad de sales de Epsom. A continuación, aplica esta mezcla homogénea sobre tu rostro humedecido y déjala actuar por 3 minutos. Al final, aclara con agua tibia.

    También puedes preparar un exfoliante para todo el cuerpo, siempre mezclando la crema hidratante y el sulfato de magnesio a partes iguales. La mezcla resultante se aplica sobre el cuerpo, se deja actuar por 3-5 minutos y se retira con agua tibia.

  3. Para mejorar el funcionamiento del sistema cardiovascular

    Si adicionas una pequeña cantidad de sulfato de magnesio a tu baño, comprobarás como el dolor muscular se desvanece, como por arte de magia. Este compuesto también ayuda a reducir la presión arterial alta y a prevenir enfermedades tales como la trombosis. Este baño terapéutico es muy fácil de preparar, solo basta añadir 2 tazas de sales de Epsom en el agua. ¡Quedarás más relajado que nunca!

  4. Para perder esas libritas de más

    Muy pocas personas conocen que las sales de Epsom son increíblemente efectivas en la lucha contra el exceso de peso. Para ello, mezcla 1/4 taza de agua y 1 cucharada de sulfato de magnesio. Luego, coloca esta mezcla en un pequeño paño de algodón, que envolverás alrededor de tu abdomen o muslos. Este tratamiento debe durar de 20-25 minutos. ¡En solo 10 días podrás comprobar el resultado!

  5. Como una compresa terapéutica

    El sulfato de magnesio se utiliza también en cataplasmas para contusiones, esguinces, dolores musculares severos y picaduras de insectos. Esta compresa terapéutica se prepara mezclando una taza de agua caliente con la misma cantidad de sales de Epsom.

  6. Como agente antifúngico

    El sulfato de magnesio también sirve para deshacerse de los hongos de los pies y las uñas. Este producto antifúngico se prepara mezclando en un pequeño recipiente 100 gramos de sulfato de magnesio con 2 litros de agua caliente. Coloca tus pies en el agua por 15 minutos. Los mejores resultados se obtienen luego de, al menos, 10 sesiones terapéuticas.


 
Así que ya sabes… La próxima vez que vayas a la farmacia, no te olvides de comprar un frasco de sales de Epsom. Este compuesto químico es una joya, no dudes en aprovecharlo para tu salud y belleza. Comparte este post con tus amigos, para que conozcan los enormes beneficios del sulfato de magnesio. Seguro te lo agradecerán…

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