Encuentra todas las C en 15 segundos. Un reto para los que confían en su capacidad de observación.

La búsqueda de letras y números ocultos es una de las pruebas más sencillas y populares de observación e inteligencia. Sin embargo, en este caso sencillez y facilidad no son sinónimos. Lo cierto es que sólo unos pocos elegidos entre nuestros compañeros pudieron enfrentarse a este tipo de rompecabezas. Una triste situación, en realidad, porque la observación es necesaria en la vida cotidiana. Es por ello que necesitamos comenzar a entrenar nuestras capacidades cuanto antes.

Números ocultos: un rompecabezas para testarudos e ingeniosos

La esencia de la prueba

Todas las tareas de nuestra selección de hoy se basan en el mismo principio. Tenemos una cierta cantidad de símbolos idénticos, entre los que se ocultan excepciones. ¿Una tarea sencilla? En absoluto. Verás, el ojo de un adulto moderno «se nubla» a un ritmo excepcionalmente alto.

Una broma es una mentira, pero hay una pista en ella

La gente que desprecia estas diversiones, llama a estas tareas «entretenimiento para contables». En efecto, hay algo de verdad en esta definición. Un buen contable realmente necesita esa formación, ¡porque sus errores podrían resultar ser pérdidas multimillonarias para la empresa!

Sin embargo, el asunto no se limita sólo a los contables. Rompecabezas de este tipo serán útiles para todos los que están obligados a tomar rápidamente decisiones rentables. Para ellos, una «vista nublada» equivale a confesar su incapacidad. En general, ejercitar la observación será útil para todos.

Cuestión de edad

Algunas personas cuando intentan justificar su despiste, lo primero que hacen es acusar a la edad. Dicen que en la juventud todos nos distinguimos por una observación excepcional, y con el tiempo la perdemos inevitablemente. De hecho, los expertos han descubierto hace tiempo que los niños se las arreglan con las tareas de nuestra selección actual mucho más rápido que los adultos.

Es cierto que la edad no nos quita a todos la observación. Al contrario, esta propiedad desaparece sólo en las personas acostumbradas a la rutina diaria. La monotonía diaria convierte a una persona en un robot, quitándole poco a poco no sólo la observación, sino también la capacidad de aprender algo nuevo.

Una panacea inesperada

Afortunadamente, este proceso es bastante reversible, sólo hay que aplicar una cierta dosis de esfuerzo. Puzzles, viajes, deportes, aficiones… todo esto nos permite distraernos de la gris rutina y mirar el mundo que nos rodea desde un ángulo diferente. Por eso la gente necesita tareas como nuestra selección de hoy.

Y a medida que envejecemos, la necesidad de este tipo de entrenamiento para la mente no hace sino aumentar. Con los años, nuestro cerebro se desgasta tanto como nuestro cuerpo. Pero los rompecabezas, las tareas, los acertijos y otros «alimentos para la mente» nos ayudan a resistir el efecto destructor del tiempo y a afrontar la vejez con dignidad.

Los científicos lo aseguran: las personas que trabajan regularmente con tareas inusuales, reducen significativamente la probabilidad de convertirse en víctimas de enfermedades relacionadas con la edad. Y eso por no hablar de que tales personas viven de forma mucho más interesante que sus coetáneos que sólo conocen el sofá y la televisión. No dejes que se seque tu mente, trabaja en ti mismo, y pronto serás capaz de decir «gracias, mi mente está al ciento por cien»

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