Hace unos años me di cuenta de que algunos restaurantes lucían interesantes lámparas de araña como parte de su diseño. Sobre todo, su techo me recordó a la mitad de una cáscara de huevo con bordes irregulares. Textural, ligero, en un estilo étnico moderno. El lado exterior del techo, por regla general, era oscuro y el interior estaba pintado en un color brillante. Y nunca hubiera pensado que alguien hiciera este techo con sus propias manos.
En algún momento, esta tendencia se hizo tan popular que no aparecieron plafones en las cafeterías, sino cuencos de la misma ópera. Y lo más sorprendente para mí no fue que se vieran un poco extraños, sino, de lo que estaban hechos estos plafones y cuencos. Al final resultó que se trataba de papel higiénico ordinario.
CÓMO HACER UN PLAFON DE PAPEL HIGIÉNICO
Cuando se conoció el secreto principal de este oficio, no fue difícil encontrar una clase magistral. Al final, hacer plafones que parecen cáscaras de huevo es más fácil de lo que pensaba. ¡Y más, si lo disfrutas con toda la familia!
Necesitarás:
- 5 rollos de papel higiénico
- Pegamento de pva de 500 ml
- Agua
- Tapas de plástico
- Pinturas acrílicas
- Globos de aire
Pasos:
- Elige papel higiénico, si quieres el más económico, incluso sin núcleo. Desenróllalo, rómpelo y échalo en agua que no lo cubra por completo, para que absorba todo. Déjalo por un par de horas.
- Luego, usando una licuadora de inmersión o una picadora de carne, muele el papel empapado junto con pegamento PVA hasta lograr una papilla. Si la mezcla resulta demasiado seca, agrégale un poco más de agua.
- Infla globos. Es deseable que sean grandes, aunque depende de la lámpara y de la idea. Cubre la parte superior de la bola con la mezcla de papel. No te olvides de dejar un agujero para la plomada.
- Deja que la cubierta se seque, luego retírala con cuidado de la bola. Comprueba si el agujero se ajusta a la plomada, límpiala si fuera necesario.
- Luego, pinta la lámpara usando toda tu imaginación. Será mejor tomar dos colores diferentes para el lado exterior e interior.
- Para mantener una suspensión más segura, refuerza la zona con una tapa de plástico. ¡Listo!
La parte superior del plafón se puede alisar y hacer más prolija. O puedes, por el contrario, darle un relieve muy especial. Experimenta con los colores también. Los oscuros con los claros se ven especialmente ventajosos, ya que el techo parece brillar desde adentro.
¿Te ha gustado nuestra clase magistral? ¡Intenta repetirla en casa! Escríbenos en los comentarios sobre tus ideas y resultados, danos un Me Gusta y comparte con las amistades de las redes sociales este post y sobre todo tú opinión; sin dudas ayudará a enriquecer nuestro trabajo.