Cómo proteger el fregadero de la cocina contra la obstrucción.

Para facilitar la vida de las personas, cada día se inventan más y más dispositivos novedosos y útiles, sobre todo para la cocina. Con ellos, se pueden cocinar rápidamente los alimentos, lavar los platos… En fin, simplificar las cosas en el hogar. Sobra decir que ¡Simplemente Genial! apoya plenamente estas interesantes innovaciones. Hoy veremos cómo proteger el fregadero de la cocina, para que no se obstruya.

Los restos de comida, que paran en el fregadero después de lavar los platos, a menudo causan problemas muy serios. Incluso una rejilla no es suficiente protección. Al final, tienes que recoger estas resbaladizas suciedades, que interfieren con la descarga normal del agua, con tus propias manos, ¡y eso es algo desagradable! Entonces, ¿Qué hacer para evitar la obstrucción del fregadero? Simple, hagamos un tamiz con una caja de plástico.

Fregadero limpio en la cocina

La idea es bien sencilla, y será fácil de llevar a la práctica. Para hacer esto, necesitarás una caja de plástico con tapa o un recipiente de polvo de lavar. También puedes usar una botella de plástico normal.

Toma un clavo caliente y hazle algunos agujeros en el fondo y al costado. Lo mismo se puedes hacer con un destornillador Phillips delgado.

Ahora, debes colocar este tamiz casero sobre el fregadero. La forma más fácil es hacer un agujero en la tapa del recipiente o en la pared de la botella. Luego cuélgalo del grifo. Pero, si el diseño del grifo o la forma del fregadero no te lo permiten, hay otra variante.

En este caso, necesitarás un gancho. Pégalo al azulejo y fija el recipiente. Si tienes ventosas, también funcionan. Haz un agujero en la caja del tamaño deseado y fija la ventosa. Luego, coloca el tamiz en el lugar más apropiado.

¿Por qué hacemos esto? Cuando laves los platos, toda el agua sucia con los restos de comida pasará por un tamiz. El líquido drena a través de los agujeros y los desechos se acumularán en la parte inferior del dispositivo. Solo tienes que tirar la basura en un balde, enjuagar el recipiente y guardarlo hasta la próxima vez.

Esta elemental invención protegerá el fregadero de la cocina y reducirá el tiempo de limpieza. No tomará más de 30 minutos hacerlo, y así evitarás las tupiciones y el mal olor de las tuberías. Además, todos los materiales están a la mano. ¡Realmente funciona!

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