El cáncer es una enfermedad mortal que año tras año reclama la vida de millones de personas en el planeta. Hoy día existen tratamientos aislados y muy costosos para combatir este flagelo, que, por desgracia, no garantizan la recuperación al 100%.
Por esta razón, muchos especialistas se dedican a buscar tratamientos alternativos que reemplacen la quimioterapia. Las toxinas matan no sólo las células cancerosas, también le causan daño al organismo, que en muchas ocasiones no logra recuperarse de tal agresión.
Sin embargo, existe un remedio eficaz para esta temible enfermedad: la vitamina B17 (también conocida como Laetrile o Amygdalin). Esta actúa de forma selectiva, destruyendo cualquier tumor maligno en tu sistema. La sustancia se puede encontrar en los huesos de frutas, tales como albaricoques, duraznos, manzanas, cerezas y ciruelas.
El tratamiento del cáncer por medios alternativos
Al B17 lo llaman «agente quimioterapéutico perfecto». Esta vitamina actúa de forma selectiva: solo afecta las células cancerosas que contienen la β-glucosidasa. ¡B17 las destruye sin afectar el tejido sano!
También actúa como analgésico, mejora el metabolismo y ralentiza el proceso de envejecimiento.
El Dr. Ernst T. Krebs, Jr., un bioquímico de San Francisco, expuso la teoría de que el cáncer, como el escorbuto, no es causado por algunas bacterias misteriosas, un virus o una toxina. Según él, su causa es la deficiencia de vitaminas, causada por la escasez de ingredientes esenciales en la dieta de seres humanos modernos.
Hace siglos, nuestros antepasados utilizaban el pan de mijo, muy rico en vitamina B17, pero hoy día preferimos el pan blanco que no lo contiene.
Antaño, nuestras abuelas solían triturar las semillas de ciruelas, pasas, uvas verdes, manzanas, albaricoques, y lo agregaban a mermeladas y alimentos enlatados. Las abuelas no se preguntaban mucho por qué lo hacían, era la costumbre. ¡Hoy se conoce que estas semillas son una fuente poderosa de vitamina B17!
¿Por qué la medicina moderna omite todas las terapias naturales para el tratamiento y la prevención del cáncer? La respuesta no está en la ciencia sino en la motivación económica de las potencias médicas.
Cada año, miles de millones de dólares a nivel mundial son dedicados a las investigaciones del cáncer. Otros miles de millones provienen de la venta de sustancias químicas y fármacos.
Esto conlleva a una conclusión algo cínica, pero no por eso menos cierta: del cáncer «se alimentan» más personas, que las que mueren. Y si la solución se puede encontrar en una simple vitamina, una gran industria colapsaría de la noche a la mañana. A lo que, por supuesto, ella se opone con todas sus fuerzas.
El núcleo duro en el interior de la semilla de albaricoque no está ahí para ser desechado. ¡De hecho, su densa cáscara protege uno de los alimentos más asombrosos de la Tierra!
¡Vencer el cáncer sin intervención médica es posible! No pierdas la fe, presta mucha atención a tu alimentación y forma de vida. Mantén el buen ánimo y cuídate del estrés. Y si tienes un amigo que necesita ayuda en la lucha contra esta temida enfermedad, como profilaxis, recomiéndale el uso de la audaz vitamina B17 que se oculta en los huesos de albaricoque. Una cura simple, eficiente y muy eficaz…
Cuida tu salud y la de tus seres queridos, comparte esta importante información con tus amigos. ¡De seguro te lo agradecerán!
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