Las zapatillas blancas de suela alta han sido mi tipo de calzado favorito desde que era estudiante. Por desgracia, perdieron su aspecto más rápido de lo que dejaron de gustarme. Por eso, cuando me compré los zapatos este verano, me preocupaba mucho tener que llevar zapatillas blancas todos los días. Al fin y al cabo, requieren mucho mantenimiento.
Aunque no lo creas, he abordado este tema con responsabilidad. ¿Cómo lograr mantener las zapatillas tan blancas? – les pregunté a mis amigos, que tienen más de un par blanco como la nieve. Incluso, consulté a los empleados de las tiendas de calzado. Resulta que mantener la blancura de los zapatos no es tan difícil. ¡Comparto mi experiencia!
Ni un solo paso sin tratamiento
Si tienes la suerte de poseer un par de zapatillas blancas, prepárate para algunos tratamientos previos al calzado. Por supuesto, los zapatos blancos de tela (zapatillas de deporte, por ejemplo) se pueden usar sin estrés. Mételos en la lavadora y podrás volver a usarlos a la mañana siguiente. Pero hay que tener en cuenta que debido a los frecuentes lavados, las zapatillas pierden su forma.
Los expertos recomiendan, antes de salir de casa, tratar el tejido y el cuero de las zapatillas de deporte blancas con repelente de agua. En cuanto a composición, los más caros y los más baratos no difieren mucho, así que aquí puedes ahorrar dinero.
Dicho revestimiento rellena la topografía del material del zapato. Esto evita que se filtre el polvo y la suciedad. Además, fregar las manchas de suciedad de tus zapatos es mucho más fácil si están recubiertos con un repelente de agua.
Cómo limpiar las zapatillas blancas
Antes de aplicar una capa de protección, hay que lavar bien el calzado. Esto depende de lo sucio que esté. Por ejemplo, las manchas de los tejidos se eliminan fácilmente con pasta de dientes o bicarbonato y zumo de limón. Aplica el producto y frótalo con un cepillo. Retira la espuma con una esponja.
Las rayas oscuras y las manchas persistentes en la parte engomada de una zapatilla de correr pueden eliminarse con una esponja de melamina. Sin embargo, no limpies el cuero con ella, a menos que desees estropear el aspecto del zapato.
Para las manchas en el cuero, prueba utilizar una solución jabonosa. Si eso no funciona, recurre a productos especiales: espumas y toallitas para zapatos.
He de ser sincera, las zapatillas blancas son como zapatos de vestir para mí. Intento mantenerlas muy limpias, pero siempre me preocupa dañarlas en el proceso. Por eso, para llevar las zapatillas blancas con tranquilidad, hay que tratarlas con un repelente de agua y tener siempre a mano una toallita húmeda.
¿Tienes zapatos blancos como la nieve? ¿Cómo los cuidas? Comparte tus secretillos con nosotros y con tus amistades de las redes sociales.