Las orquídeas crecen como la levadura, la patada mágica para nuevas hojas y raíces

¿Cómo transferir una orquídea a una nueva maceta? Muchos creen que la orquídea es una belleza caprichosa y exigente del mundo de las flores. Esto no es del todo cierto. Hay que saber con seguridad cómo cuidar esta hermosa planta, qué le gusta y qué no. Además, se recomienda mantener las orquídeas en buen estado durante el trasplante utilizando productos especiales. ¿Cuáles? Averigüémoslo juntos.

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CÓMO TRASLADAR UNA ORQUÍDEA A OTRA MACETA

Todos los cultivadores de flores están de acuerdo en que nunca se debe trasplantar una orquídea mientras está floreciendo. Esto es cierto, ya que el trasplante es estresante para la planta. Esto puede hacer que pierda todas sus flores y capullos. Sólo se debe hacer esto si la orquídea necesita ser rescatada inmediatamente. Por ejemplo, cuando la flor se ve afectada por enfermedades, raíces podridas y diversos musgos. Si no se replanta a tiempo, se corre el riesgo de decir adiós a la planta para siempre. Así que evalúa la situación adecuadamente.

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EL PROCESO CORRECTO

A las orquídeas no les gustan los trasplantes frecuentes, pero si hay necesidad de hacerlo, hay que actuar. Además, la flor suele venderse en un contenedor temporal, por lo que el trasplante es simplemente inevitable. Se puede saber mirando las raíces de la planta e intentando salir de la maceta.

Para el trasplante necesitarás la orquídea propiamente dicha, una maceta de plástico con agujeros de drenaje, sustrato para orquídeas, tijeras y carbón activado. Polimeriza la planta para facilitar la extracción de la orquídea de su antiguo contenedor. La nueva maceta debe ser ligeramente más grande para que puedan caber todas las raíces. Después de retirar la orquídea, lava las raíces bajo el grifo y elimina cualquier residuo del antiguo sustrato. Aparta la flor durante unos 20 minutos y deja que las raíces se sequen ligeramente.

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Después, inspecciona las raíces para ver si están podridas. Es mejor podarlas suavemente para mantener la flor viva. Los floristas también aconsejan espolvorear ligeramente las zonas cortadas de las raíces malas con polvo de carbón activado. Esto ayuda a la planta a curarse más rápidamente. Si no dispones de carbón activado, puedes utilizar un poco de canela.

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AYUDA PARA SALVAR VIDAS

Lo mejor es trasplantar la orquídea a una maceta de material transparente, ya que las raíces también participan en la fotosíntesis. Una vez eliminadas las raíces malas, la flor debe colocarse con cuidado en la nueva maceta, llenándola gradualmente de sustrato. No te preocupes si aún quedan algunas raíces en la superficie. Esto es normal para una orquídea.

Una orquídea trasplantada debe ser vigilada. Es probable que la planta esté estresada durante un tiempo, pero que no cunda el pánico. Si la planta está bien, pronto se recuperará. Colócala en un lugar agradable, alejado de la luz solar directa.

Grigory Goryachevsky, un especialista en orquídeas de renombre, en su canal de YouTube del mismo nombre, recomienda dar a la planta una patada salvadora tratándola con un tónico especial contra el estrés. Contiene estimulantes biológicos del crecimiento de las plantas en condiciones adversas. El trasplante (aunque sea de forma adecuada) es precisamente una condición de este tipo.

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Puedes comprar este tónico en tiendas especializadas. Puedes aplicar el tónico a las hojas el día antes de regar, cuando la planta tiene sed y ya ha absorbido la humedad anterior. Puede disponer las flores en una ducha tan peculiar y en el día del riego, pero es mejor regar después de que el tónico haya sido absorbido.

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Ahora ya sabes cómo trasplantar una orquídea a otra maceta. Y también cómo ayudar a la flor a sobrevivir a un periodo tan estresante. ¡Que tus hermosas orquídeas florezcan suavemente y se mantengan sanas! Danos un Me Gusta y comparte con las amistades de las redes sociales este interesante artículo y sobre todo tu opinión.

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