Todos los amantes de la jardinería saben lo que significa un jardín enfermo. Y es que, a pesar de todos los cuidados, riegos, trasplantes y fertilizaciones, muchas veces, la planta termina marchitándose y pasando a mejor vida…
Las plantas están presentes en prácticamente todos los hogares. Las amamos por su belleza, porque van bien con la decoración, porque le dan ese toque hogareño al espacio, y también porque ayudan a limpiar el aire que respiramos.
No obstante, no somos los únicos en amarlas… ¡Las plagas, insectos y parásitos también! Estos diminutos invasores, a menudo, son los responsables de que todos nuestros esfuerzos por cuidar bien de nuestros jardines sean en vano.
Afortunadamente, ¡Simplemente Genial! conoce un simple truco, que te puede ayudar a devolverle el vigor a tus plantas, e incluso hacerlas florecer. Probablemente te sorprendas, pero solo vas a necesitar cerillos de fósforos.
Cómo salvar tu jardín
Sólo tienes que tomar algunos fósforos y enterrarlos alrededor de la planta, cabeza abajo en el suelo, a 5 cm del borde del jarrón. Luego, riega las flores. En dos días, reemplaza los fósforos con nuevas cerillas. ¡Para tu sorpresa, dos días más tarde, las plagas desaparecerán!
El secreto está en la cabeza de las cerillas, mejor dicho, en su composición: el fósforo contiene azufre, quien es el responsable de ahuyentar, de forma permanente, a las molestas plagas.
Este método es de gran ayuda para los jardineros, sobre todo porque ya no necesitarán invertir en costosos plaguicidas, tan dañinos para la salud y el ambiente. Otra manera de uso: Empapa un pedazo de pan, y haz una bola del tamaño de una nuez de nogal con él. Pégale dentro 10-12 cabezas de fósforos. Con la humedad, el fósforo se disuelve… Ahora, solo necesitas amasar la masa, para que el azufre se distribuya homogéneamente.
También puedes hacer pequeñas bolas de pan rallado, del tamaño de un guisante, que luego pondrás en los agujeros de gusano, a una distancia de 0.5-0.7 m una de la otra. De esa manera, te desharás de las pestes.
Ahora que ya sabes esto, no necesitas correr a la tienda, y gastar tu dinero para el cuidado de tus plantas. A veces, los problemas complejos solo necesitan soluciones simples. ¡Y este es un ejemplo excelente!
Esperamos que esta información te ayude a salvar a tu querido jardín, y a las plantas de tu habitación. También, podrías compartirla con tus amigos… ¡Seguro te lo agradecerán!