Para los jardineros principiantes, decorar macizos de flores puede parecer una tarea muy difícil y costosa. Sin embargo, en realidad no hay nada complicado en esto. De hecho, puedes ordenar tu casa de verano incluso con un presupuesto muy limitado.
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La clave del éxito en este esfuerzo (como en cualquier otro) radica en comprender el resultado que se desea alcanzar al final. Y el resultado, a su vez, depende de cuán cuidadosamente se elabore el plan de acción. Después de todo, la decoración del jardín es todo un arte.
Hoy, ¡Simplemente genial! te mostrará los detalles de esta empresa. Continúa con nosotros.
DECORACIÓN DE MACIZOS Y JARDINES DE FLORES
Para diseñar de hermosa y eficiente manera una cama o macizo de flores y un jardín, primero debes comprender cómo difieren entre sí.
El macizo de flores, en su versión clásica, es una configuración de forma geométrica regular, cuya línea de contorno está bien enmarcada, ligeramente elevado sobre el resto del territorio.
Pocas personas deciden hacer una cama de flores con plantas perennes. Por lo general, en el patio, se siembran pequeños macizos de flores, cuya variedad es anual y cuya floración coincide en el mismo período.
Por cierto, la elaboración preliminar de un esquema de los tipos de flores es uno de los puntos más importantes del diseño del macizo. La compra apresurada de plántulas y semillas a menudo conduce a costos y ansiedad innecesarios.
Los jardines de flores se denominan subespecies de macizos de flores, caracterizados por su irregularidad e independencia. Pueden tener absolutamente cualquier forma. Y su característica principal es la falta de límites claros que los separen del resto del territorio.
Entre otras cosas, el jardín de flores se puede plantar con plantas diferentes, sin preocuparte por el sincronismo de su floración.
Para elegir entre un jardín de flores y un macizo de flores clásico, debes decidir dónde y cómo ubicar las flores.
En el jardín, por ejemplo, se ve mejor el macizo de flores con un contorno redondo. La forma redonda se adapta perfectamente a cualquier espacio. A diferencia de otras formas geométricas, no tiene ángulos y, por lo tanto, no se enfoca hacia ninguna parte del territorio.
Si las flores crecen en el porche, puedes comenzar con bordes limitados. En este caso, todo lo que se requiere es simplemente plantar en línea recta.
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En cuanto a la separación entre macizos y césped, muchas personas prefieren hacer un borde de piedra. Esta opción de demarcación, sin duda, se ve muy armoniosa y elegante. Sin embargo, en la práctica, se pueden notar importantes deficiencias.
Solo un par de meses después del cercado del macizo de flores, en las piedras comienzan a crecer abundante maleza, lo que resta estética. Además, cortar el césped se vuelve extremadamente incómodo. En seis meses, el tiempo dedicado a la apariencia ordenada del macizo de flores y al césped alcanza valores altísimos.
Y entre otras cosas, después de 2 a 3 años, las piedras se hunden casi por completo en el suelo. Debido a esto, los límites tendrán que ser reinstalados constantemente.
La alternativa más simple y menos costosa a un bordillo de piedra es un pequeño surco en el suelo. Para hacerlo, todo lo que necesitas es profundizar en el suelo alrededor del macizo de flores, en un ángulo de 45 grados, y luego cubrir el espacio con pasto cortado o aserrín.
Tal delimitación se verá muy bonita y muy práctica, a diferencia de otras opciones. Además, durante las lluvias prolongadas, servirá como un sistema de drenaje natural.
Como puedes ver, no necesitas gastar una gran cantidad de tiempo y recursos para diseñar un hermoso macizo o jardín de flores. ¡Basta que muestres un poco de imaginación! Cuéntanos cómo lo logras, y comparte esta idea con tus amigos de las redes sociales.
