A la hora de lavar, tener a mano una lavadora es una verdadera bendición. Es mucho lo que ahorramos en tiempo y esfuerzo con ella. Sin embargo, hay cosas muy pesadas que, por mucho que queramos, son imposibles de lavar allí. Por supuesto, podrías intentarlo, pero la lavadora, en el mejor de los casos, no centrifugará, y en el peor de los casos, dirá: ¡Adiós! Estamos pensando en el lavado de una manta.
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Un Plaid es bastante grande, pero cuando recibe agua es simplemente demasiado pesado de levantar, hasta para un hombre adulto. Además, todavía hay que exprimirlo y enjuagarlo de alguna manera. Comprenderás que este proceso es muy trabajoso para una lavadora doméstica. Por eso, ¡Simplemente Genial! decidió compartir contigo un truco útil para resolver este problema.
CÓMO LAVAR EL PLAID
Investigamos el tema y llegamos a la conclusión de que tal problema está lejos de ser una excepción a la regla. Para lavar una manta grande y esponjosa, las amas de casa tienen que ingeniárselas, y no pueden hacerlo sin ayuda externa. Se quejan, a la vez, de no haber comprado una lavadora más grande.
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Muchos dirán: «¿Por qué te complicas? Llévalo a la tintorería o ir a la lavandería, donde las máquinas son más grandes y más resistentes, y ya». Pero todo esto requiere costos financieros, y la limpieza en seco no siempre da el resultado deseado. Puede que algunas mantas no se puedan limpiar a máquina en absoluto, por lo que solo queda lavarlas a mano. Entonces, ¿qué hacer?
Cómo lavar una manta
Nuestros trucos son sencillos y sin pretensiones. Es genial si tienes un baño; este es quizás un requisito previo. También necesitarás una palangana grande, palos de unos pocos metros o más (aunque los trapeadores y escobas, si están disponibles en el hogar, también servirán) y botas de goma limpias, aunque estas no son tan necesarias. Entonces…
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- El proceso es prolongado, por lo que deberás prepararte para ello. Lo primero es descubrir cuál es la mejor manera de lavar tu manta mullida y qué productos son adecuados para ello. Por defecto, utilizaremos agua tibia y un poco de detergente en polvo.
- Llena el baño con agua tibia, que sea cómoda para la piel, y pon ahí la manta. El agua debe cubrirla por completo, aunque no necesita flotar. No le eches mucho polvo, porque entonces será más difícil enjuagarla después.
- Ahora, introdúcete en el baño y con los pies, durante diez minutos, «pisotea» la alfombra mientras «charlas o cantas». ¿Qué pasa si deseas agregar una gota de Fairy para eliminar las manchas? Para eso están las botas de goma. Sin embargo, si no te preocupa la piel de tus piernas, puedes andar descalza.
© Depositphotos - Saca el tapón, deja que el agua sucia se drene correctamente. Dale veinte minutos. Luego, vuelve a llenar de agua, puedes arrugar un poco la manta con las manos y así sucesivamente hasta que el agua se aclare. Deja actuar media hora, y luego pon a escurrir.
- Ahora, colócala al lado del baño. Agarra la manta por un borde y tírala por el costado para que una mitad quede en el baño y la otra en el lavabo. Con los palos, extiende la manta tanto como sea posible y déjala escurrir hasta la mañana.
- Dos palos son suficientes para apoyarlos a los lados del baño. Pero cuanto más, mejor, por lo que la manta se secará de manera mucho más eficiente.
- Por la mañana, puedes ponerla en una cuerda o en un secador preparado. En ese momento, ya será posible levantarla sin el riesgo de lastimarte la espalda. ¡Hecho!
Editorial
Coincidimos en que el método es más bien artesanal, y es extraño que todavía recurramos a él. Pero, si es necesario, ya sabes cómo se hace, y puedes tener la seguridad de que al lavar y escurrir manualmente una manta colosal, tu espalda quedará sana y salva. ¡Este no es un trabajo para una mujer frágil, sino para una guerrera!
Probablemente haya otras formas igualmente efectivas de lavar una manta. Asegúrate de escribirnos sobre ellas en los comentarios, nos encantará ampliar nuestros conocimientos y opciones. Mientras tanto, lee el útil artículo sobre si usar cápsulas al lavar en una lavadora, o si sería mejor rechazarlas. ¡Gracias por estar con nosotros!
