¡Cuán agradable es dormir sobre una ropa de cama pulcramente limpia! Pues sí, estas prendas suelen lavarse cada una o dos semanas, pero… ¿Y las almohadas? Estas no merecen menos atención, ya que colocas tu cabeza sobre ellas cada noche…
Con el tiempo, sobre las almohadas comienzan a aparecer unas manchas amarillas de sudor, sin contar que dentro se acumulan el polvo y otras partículas. ¡Y comprar almohadas nuevas, varias veces por año, no es la salida! Existe una forma muy efectiva de devolverle la blancura a tus almohadas, sin mucho esfuerzo. «Simplemente Genial» te propone conocer los detalles…
Este método se presta para las almohadas de algodón, así como para las de plumón y las sintéticas.
Como lavar correctamente las almohadas
- Retira las fundas de las almohadas, estas prendas deben lavarse por separado. Si tus almohadas tienen fundas especiales, lávalas también independientemente.
- Pon las almohadas en la lavadora. Lo mejor es lavarlas de dos en dos, así las almohadas no se aplastarán contra las paredes.
- Añade el producto para lavar. Para blanquear efectivamente las almohadas y eliminarles las manchas de sudor, mezcla 1 vaso de detergente en polvo, 1 vaso de blanqueador y el medio vaso de bórax.
- Pon en marcha la lavadora con el agua lo más caliente posible. Enjuágalas dos veces para eliminar cualquier resto de la química.
¡Y ya está! Después, solo resta secar las almohadas como de costumbre. Asegúrate de que las mismas no hayan dejado rastro del relleno en el tambor de la lavadora, para evitar futuros problemas mecánicos.
No dudes en probar este método. ¡Descansarás esta noche tan placenteramente como un bebé! Y no olvides compartir este truco con tus amigos, seguro te lo agradecerán…