Cuando queremos prepar un plato rápido y nutritivo, a menudo, resolvemos con productos semielaborados, especialmente de pollo. Estamos acostumbrados a comprar partes por separado: muslos, carapacho, alas, pechuga y etc. Sin embargo, para ahorrar gastos en la compra de carne, ¡es preferible comprar pollos enteros! «Simplemente Genial» te aconseja comprar más de un pollo a la vez, y luego, cortar la carne correctamente y congelarla.
Este sencillo truco te ayudará a utilizar toda la carne sin desperdiciar nada: te saldrá la máxima cantidad posible de platos. Así, cuidarás no solo el presupuesto familiar, también el tiempo de hacer compras adicionales. Así que, compra 4 pollos, un trozo de cerdo, y después, reparte la carne de la siguiente manera:
- Corta las alas y los muslos — te saldrán 8 alas y 8 jamoncitos. Es la cantidad de carne suficiente para cenar y almorzar 2 veces.
- Corta el filete de las pechugas, haz chuletas y congélalas. Te debe salir 16 chuletas.
- Separa la carne restante de los huesos, pásala por la picadora junto con la carne de cerdo. Separa la mitad de la carne picada, añádele vegetales y arroz. Utilízala para preparar rollos de repollo o albóndigas. Congélalo todo.
- Del picadillo restante, prepara albóndigas para la sopa. Además, agregándole pan y patatas ralladas, obtendrás muy sabrosas y tiernas hamburguesas.
- Hierve los huesos, divide el caldo entre 6—7 vasos, congélalos y utiliza para preparar sopas.
¡Como ves, todo es muy sencillo! Este método de procesar pollo te librará de los pensamientos cotidianos de qué preparar para la cena. ¡Toma nota de este truco y no olvides compartir tus experiencias con tus amigos!