Imagina una situación curiosa. Te han invitado a una casa ajena y necesitas urgentemente intimidad en el lavabo. Intentas hacer todas las tareas rápidamente. Y cuando tus ojos buscan algo que cubra tus huellas, no encuentras nada. ¡No hay ambientador para el lavabo!
Ya me he encontrado ante este tipo de situaciones. Lo único que me salvó fue una caja de cerillas, que siempre llevo conmigo. Por qué lo hago, te lo cuento más adelante en el artículo. Y al final, compartiré un par de consejos para ambientadores caseros para el inodoro.
AMBIENTADOR PARA EL BAÑO
Sucede que no todas las personas utilizan un ambientador para el inodoro. En casa, cuando sólo van al baño los miembros de la familia, no hay problema. Pero, ¿y si un invitado tiene que utilizarlo para refrescarse?
Antes solía llevarme mi propio perfume. Pero entonces descubrí el truco de una cerilla normal y corriente. Para eliminar el olor desagradable del lavabo, basta con encender una cerilla y dejar que arda hasta el final. Luego puedes tirarla.
Cuando arde una cerilla, se libera gas dióxido de azufre. Esta sustancia es la que interfiere con el olor a metanotiol o ácido sulfhídrico que hay en el aire cuando vamos al baño. Mi abuela solía encender un trozo de papel normal y dejarlo arder. Y luego lo tiraba por el retrete. Un plan que también funciona.
Cómo aromatizar tu espacio de aseo
Una de las cosas más fáciles y sencillas para aromatizar un lavabo es la pasta de dientes. Compra una pasta de dientes con un sabor claramente mentolado. Después, hazle agujeros por toda la superficie, presiona un poco el tubo y colócalo en el desagüe. No tendrás problemas para fijarlo allí.
Habrá un agradable aroma a mentol en el aire después de cada descarga. No tienes que hacer nada extra. Además, el producto en sí es muy económico.
Puedes hacer tu propio ambientador para el baño. Es un truco práctico si no te gustan los productos químicos comprados en las tiendas. Por ejemplo, con bicarbonato de sodio se puede hacer en pocos minutos un ambientador ecológico. Mézclalo con 20 gotas de tu aceite esencial favorito y cáscaras de naranja picadas. Viértelo todo en un recipiente pequeño y colócalo en un estante del cuarto de baño.
Puedes preparar tú mismo un ambientador en gel económico. Disuelve 25 g de gelatina en un vaso de agua y añade glicerina y un aceite esencial aromático. La pomada de frutas es otro truco que puede hacer que tu baño huela bien durante meses.
Para esto necesitarás cualquier tipo de cítrico: naranja, mandarina o limón. Haz agujeros en toda la circunferencia de la fruta con un palillo. A continuación, unta el cítrico con una cantidad generosa de canela. Al final, clava un clavo en los agujeros y deja que la fruta se marchite en un lugar oscuro durante 2 semanas. Listo.
En verano se puede preparar un aromatizante floral. Hay que poner pétalos de rosa, lilas y flores de jazmín en un tarro de cristal y espolvorearlos con sal. Coloca las flores en varias capas, espolvoreando cada una de ellas con sal hasta el borde.
A continuación, vierte unas cucharadas de alcohol y déjalo en un lugar oscuro durante 2 semanas tapado. Cuando necesites refrescar el ambiente, sólo tienes que abrir la tapa y disfrutar del agradable aroma floral. ¡Todo es brillantemente sencillo!
Consejo del editor
En nuestro sitio web encontrarás muchos otros artículos útiles con temas similares. Por ejemplo, aprenderás cómo hacer un ambientador casero con tus propias manos. Se trata de un sencillo difusor aromático con varillas, que puede construir cualquier anfitriona. ¡Pruébalo!
© DepositphotosY si tienes algún otro truco casero en tu arsenal, no dejes de compartirlo en los comentarios. ¡Que tu casa siempre huela bien!