Cuando mi marido y yo obtuvimos nuestra propia casa, uno de los regalos de mi suegra fue un modesto jarrón de áloe. Me encogí de hombros y lo mandé al alféizar de la ventana del dormitorio. Pero cuando la madre de mi marido vino a visitarnos seis meses después, me pidió, entre otras cosas, que trasladara la planta a la cocina. Me dijo: «Recuerda, el aloe siempre debe estar en la cocina. Luego me lo agradecerás». Conflicto con mi suegra a causa de una cosa tan pequeña, no iba a tener, obviamente. Además, ¡más tarde resultó que tenía razón!
Aloe en la cocina: el secreto de las anfitrionas experimentadas
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Una planta con una rica historia
La humanidad conoció las plantas del género Aloe hace muchos miles de años. Las pruebas que mencionan el uso del aloe en el hogar de nuestros antepasados, son numerosas. Esta útil planta se menciona incluso en la Biblia, no una ni dos veces, sino al menos cinco. No es de extrañar, porque los beneficios del aloe son muy variados.
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En la medicina, el aloe tiene un gran número de usos. Los preparados a base de esta planta se utilizan en la lucha contra las enfermedades del tracto gastrointestinal. Los extractos de áloe tratan la blefaritis y la conjuntivitis. El zumo de la planta se utiliza para curar heridas y quemaduras. Las mascarillas, tinturas y tónicos a base de áloe son muy populares en cosmetología.
El aloe en casa
La mayoría de estos medicamentos y remedios, por supuesto, no se preparan en casa. Pero un pequeño jarrón de aloe en la cocina seguirá siendo muy útil. Verás, el aloe puede purificar el aire de impurezas nocivas, en particular de compuestos de benceno y formaldehído. Además, esta planta puede oxigenar el aire.
Pero entonces, ¿por qué se aconseja poner aloe exactamente en la cocina? Después de todo, la planta puede purificar perfectamente el aire en el dormitorio y en el salón. El hecho es que el aloe en la cocina ayudará no sólo con la oxigenación del aire. También, al cocinar, las propiedades curativas de esta planta serán muy útiles a la anfitriona.
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Botiquín verde
Resulta que incluso las amas de casa más hábiles, de vez en cuando, se hacen heridas leves al cocinar. A veces 20 años de experiencia no son suficiente escudo contra pequeños cortes, quemaduras y contusiones. Cierto que contra los moratones el aloe, por desgracia, no será de gran ayuda, pero con cortes y quemaduras, ¡las propiedades curativas de esta discreta planta son insustituibles!
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Basta con romper un trozo de hoja de aloe y exprimir una cantidad suficiente del líquido que fluye del corte. El zumo de aloe, cuya consistencia es muy parecida a la del gel, te servirá para tratar la llaga. El aloe no sólo aliviará el dolor y detendrá rápidamente la hemorragia, sino que también eliminará el proceso inflamatorio. ¿Ya te has armado con una pequeña maceta de esta maravillosa planta?
